A pesar de que en la provincia se decreto la emergencia sanitaria desde el 29 de junio y por el lapso de 90 días, incluyendo la suspensión de clases, por lo que distintos municipio de la provincia, en lógica reacción ante el avance de la gripe A, se plegaron a esta medida no permitiendo la realización de espectáculos públicos, en la ciudad de Colonia Dora se realizo el pasado sábado, como si nada pasara, la apertura de un boliche bailable, donde cientos de jóvenes se exponen al contagio de la enfermedad, sin que desde la comuna local haya mediado ninguna acción tendiente a evitar la realización del evento, el que debió contar con la autorización correspondiente, ya que de no haberla tenido, también debería haber sido suspendida.
Recordemos que Néstor Flores, del Proyecto Padres, en un llamado de cordura, pidió actuar con responsabilidad, lo que parece no existir en las autoridades municipales de esta ciudad.
La emergencia sanitaria tiene como objetivo extremar las medidas de prevención, a fin de que la enfermedad no se propague, considerando a los boliches como un ámbito propicio para el contagio, ya que convocan multitudes y son cerrados.
Las autoridades de la seccional 42, dijeron que el evento se realizó por que contaba con autorización de la municipalidad local, lo cual les fue comunicado por el presidente del cuerpo deliberativo Ángel Allalla, aunque consultados algunos concejales dijeron que la resolución del concejo es contraria a lo manifestado por Allalla, ya que ellos prohibían cualquier espectáculo cerrado.
Numerosos vecinos consultados por este medio coincidieron en señalar la “irresponsabilidad de la intendente y de los concejales, ya que en ciudades vecinas se reunieron los concejales para prohibir este tipo de eventos y en Colonia Dora se siguen realizando como si nada pasara, ante la indiferencia de las autoridades municipales que son las que deberían velar por la salud de la población y en lugar de ello se culpan mutuamente por actos que atentan en contra de la salud de la población”.
Recordemos que Néstor Flores, del Proyecto Padres, en un llamado de cordura, pidió actuar con responsabilidad, lo que parece no existir en las autoridades municipales de esta ciudad.
La emergencia sanitaria tiene como objetivo extremar las medidas de prevención, a fin de que la enfermedad no se propague, considerando a los boliches como un ámbito propicio para el contagio, ya que convocan multitudes y son cerrados.
Las autoridades de la seccional 42, dijeron que el evento se realizó por que contaba con autorización de la municipalidad local, lo cual les fue comunicado por el presidente del cuerpo deliberativo Ángel Allalla, aunque consultados algunos concejales dijeron que la resolución del concejo es contraria a lo manifestado por Allalla, ya que ellos prohibían cualquier espectáculo cerrado.
Numerosos vecinos consultados por este medio coincidieron en señalar la “irresponsabilidad de la intendente y de los concejales, ya que en ciudades vecinas se reunieron los concejales para prohibir este tipo de eventos y en Colonia Dora se siguen realizando como si nada pasara, ante la indiferencia de las autoridades municipales que son las que deberían velar por la salud de la población y en lugar de ello se culpan mutuamente por actos que atentan en contra de la salud de la población”.
