jueves, 3 de febrero de 2011

PREOCUPACION POR RIESGO DE INUNDACIONES


A pesar de que aun en la zona no hay indicios de desbordes importantes, la gran cantidad de agua que contiene el Río Salado a la altura del departamento Avellaneda, ha generado la creciente preocupación, no solo de los productores rurales, sino también de la población en general, que hace un año se viera afectada con inundaciones que dejaron a varios barrios bajo el agua en esta ciudad, dejando a cientos de familias evacuadas, en un de las crecidas más grandes que recuerdan los lugareños.
Las noticias provenientes del departamento Figueroa que catalogan de “critica” a la situación, a acrecentado este temor, lo que es alentado por un clima inestable, con un mes de enero que se ha caracterizado por lluvias con registros que no se daban hace mas de 20 años, no permitiendo el normal escurrimiento y absorción de la gran cantidad de agua caída en este primer mes del año.
Es permanente la presencia de algunos pobladores en el puente sobre la ruta 92, que une esta ciudad con Añatuya, la que el año pasado fuera cortada por el agua, para interiorizarse del caudal que este trae, notandose en el mismo un paulatino aumento en la ultima semana.
Desde los organismos responsables se insiste en instar a mantener la calma, aunque es notoria la intranquilidad de los pobladores de los pueblos y ciudades que el pasado año se vieran afectadas por la inundación.