Durante este mediodía, numerosas personas
comenzaron a mirar el cielo de manera enigmática, sin que faltaran quienes
dicen que algunos fenómenos son indicaciones de eventos, como otros le restaron
importancia y solo lo atribuyen a un fenómeno meteorológico.
En realidad el avance de la ciencia ha
permitido al ser humano dar explicación a ciertos hechos naturales que parecían
fenómenos paranormales en otras épocas.
Es el caso de los halos solares o antelias,
que son realmente sorprendentes e inexplicables si no se tienen las nociones de
física meteorológica suficientes. En realidad es un fenómeno que no es tan raro
en todo el planeta, pero que en ciertas latitudes como la que nos encontramos
los santiagueños, suelen ser bastante frecuentes.
Este fenómeno se produce al formarse
partículas de hielo suspendidas en la tropósfera que refractan la luz que llega
del Sol, generando un espectro de colores similar al del arcoíris. Los halos o
antelias se suelen caracterizar por ser iridiscentes: por lo general hacia
adentro tienden a tener colores rojizos mientras que hacia afuera cuentan con
rojo, verde y azul claro o simplemente puede parecer un arcoíris.